En esta crítica y en la siguiente no solo os voy a hablar de dos películas preciosas, sino que también os hablaré de dos de las películas exitosas que protagonizó alguien a quien siempre he admirado mucho y que fue, es y será siempre un gran actor. Esta gran persona se llamaba Heath Ledger, digo "se llamaba" porque desgraciadamente se suicidó el año pasado y nada menos que porque su mujer le había dejado. A mí personalmente, me gusta pensar que lo hizo por amor. Pero lo cierto es que ya no está con nosotros; hecho que me entristece bastante, ya que siempre me han gustado mucho sus películas y pienso que era una gran estrella. Dicho esto, paso a contaros de qué va la peli: la historia trata de dos hermanas muy distintas, ya que una es la típica pija que anda suspirando por el "tío cachas" y no se da cuenta de quien la quiere realmente (en este caso es un amigo muy cercano), y la otra es del tipo de chicas a las que les da igual lo que la gente piense y han aprendido que lo importante no es la popularidad. Sin embargo, para controlarlas, su padre ha establecido una nueva norma: si alguna de las dos quiere salir, tendrá que convencer a la otra para que salga. La principal perjudicada en esta decisión es la hija pequeña, vamos la pija, ya que tendrá que lograr que su hermana salga. Para lograrlo consigue, mediante la ayuda de un buen amigo y algo de dinero, pagar a un tío para que salga con ella y la entretenga. No obstante, el chico en cuestión no es muy normal que digamos, más bien, es el típico macarra que pasa de todo. Pero ambos se dan cuenta, al cabo del tiempo, de que están hechos el uno para el otro. Pero... ¿qué sucederá cuando la protagonista descubra que él solo salió con ella porque su hermana la pagaba?.
No hay comentarios:
Publicar un comentario